Marisa Gómez Armenteros

Rumiación: El Trastorno Alimenticio Oculto
Síndrome de Rumiación

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La alimentación es una necesidad básica del ser humano, pero ¿qué sucede cuando esta necesidad se convierte en una obsesión? El Síndrome de Rumiación, un trastorno alimenticio poco conocido pero altamente impactante, está emergiendo como un desafío en el mundo de la salud mental.

¿Qué es el Síndrome de Rumiación?

El Síndrome de Rumiación se caracteriza por la regurgitación repetida de alimentos, que pueden ser remasticados, vuelto a tragar o escupidos. A diferencia de otros trastornos alimenticios, la regurgitación no es involuntaria ni está provocada por una condición médica. Es una acción que, aunque puede parecer voluntaria, muchos pacientes describen como incontrolable.

Historia y Origen

El término “rumiación” proviene del latín ruminare, que significa “masticar el bolo alimenticio”. Aunque fue mencionado por Aristóteles en la antigüedad, su documentación clínica se remonta al siglo XVII. La denominación se debe a la similitud de la regurgitación con la “rumia” de los animales herbívoros.

Síntomas del Síndrome de Rumiación

Los síntomas incluyen:

  • Regurgitación frecuente de alimentos.
  • Remasticación, reingesta o escupitaje del alimento regurgitado sin asco o náuseas.
  • Posible pérdida de peso y malnutrición.
  • Evitación de comer en público o en situaciones sociales por temor a regurgitar.

Impacto en la Vida Cotidiana

El Síndrome de Rumiación puede tener un impacto significativo en la vida diaria de quienes lo padecen. La constante preocupación por la regurgitación puede generar ansiedad social, evitando situaciones donde se requiera comer en público o con otras personas. Esto puede llevar a un aislamiento social y a la evitación de eventos y reuniones familiares o con amigos.

Además, la malnutrición y la pérdida de peso pueden generar problemas de salud física, afectando la energía, la concentración y el bienestar general. En el ámbito laboral o académico, la persona puede enfrentar dificultades debido a la falta de energía o la necesidad de ausentarse con frecuencia.

Causas Subyacentes

Las causas exactas del síndrome son complejas y multifactoriales. Factores psicosociales, como un entorno poco estimulante, cuidado negligente o experiencias traumáticas, pueden desencadenar el trastorno. Además, la relación entre padres e hijos puede influir en su aparición, especialmente en niños y adolescentes.

Cuándo Acudir a un Experto

Es esencial buscar ayuda profesional cuando se sospecha del Síndrome de Rumiación. Si notas que tú o alguien cercano regurgita alimentos con frecuencia, especialmente si esto se acompaña de ansiedad o aislamiento social, es momento de consultar a un psicólogo especializado en trastornos alimenticios. Un profesional podrá ofrecer un diagnóstico adecuado y proponer un plan de tratamiento personalizado.

Tratamiento del  Síndrome de Rumiación

El tratamiento varía según la edad y capacidad intelectual del paciente. En adultos y adolescentes, técnicas como el biofeedback y la relajación han demostrado ser efectivas. Para niños y personas con déficits intelectuales, las técnicas de modificación de conducta son las más recomendadas. La terapia familiar también puede ser beneficiosa, especialmente si existen tensiones en el vínculo paterno-filial.

El Síndrome de Rumiación es un trastorno alimenticio que requiere atención y comprensión. Aunque puede parecer extraño o inusual, es esencial que se aborde con seriedad y empatía. La alimentación es una parte fundamental de nuestra vida, y trastornos como este nos recuerdan la importancia de mantener una relación saludable con ella.

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